¿Qué es el trabajo de parto prematuro?
Es normal que las mujeres tengan algunas contracciones uterinas durante el embarazo. A menudo, una mujer no se da cuenta de estas contracciones, pero en otras ocasiones las contracciones pueden ser dolorosas y regulares y parecerse mucho al trabajo de parto.
Puede ser difícil distinguir entre las contracciones que son una parte normal del embarazo y las que pueden indicar el inicio del trabajo de parto prematuro.
Para diferenciar las contracciones normales del trabajo de parto prematuro, su médico puede sugerirle que controle sus contracciones. Su médico no quiere que entre en trabajo de parto antes de las 39 semanas de embarazo. Los bebés que nacen antes de tiempo se consideran prematuros y pueden tener problemas de salud importantes.
Cuanto más avanzado esté su embarazo, menos complicaciones surgen. Las contracciones pueden ser un signo de parto prematuro. Su médico también puede ordenar una ecografía transvaginal para ver si las contracciones están produciendo cambios en su cuello uterino que podrían significar el inicio del trabajo de parto.
¿Cómo se controlan las contracciones uterinas?
Las contracciones uterinas se pueden controlar externamente, sin insertar instrumentos en el útero. A esto se le llama monitorización uterina externa.
El monitoreo generalmente se realiza en el consultorio de un médico o en un hospital. Una enfermera le colocará un cinturón alrededor de la cintura y lo sujetará a una máquina llamada tocodinamómetro. La máquina registra la frecuencia y duración de sus contracciones.
Su médico también puede recomendar controlar sus contracciones en casa. Le indicarán que se siente en una posición de descanso y coloque la banda unida al tocodinamómetro alrededor de su abdomen. La máquina registra sus contracciones y transmite los datos a una estación de visualización central, generalmente en un hospital o clínica.
Allí, las enfermeras evalúan los datos y preparan un informe detallado sobre las contracciones para su médico. Las enfermeras también pueden responder preguntas sobre cómo colocarse la banda y cuidarse a sí mismo.
Las enfermeras también pueden comunicarse con usted por teléfono una o dos veces al día para ver cómo se siente. Si informa algún problema o si el seguimiento muestra cambios, la enfermera se comunicará con su médico de inmediato.
¿Qué significan los resultados?
La monitorización uterina se basa en la idea de que la frecuencia de las contracciones por hora aumenta a medida que la mujer se acerca al parto. A medida que avanza el trabajo de parto, las contracciones se hacen más largas, más duras y más fuertes.
Si la máquina mide cuatro o menos contracciones por hora, probablemente no esté en trabajo de parto. Si sus contracciones son más frecuentes, su médico le realizará una ecografía cervical o un examen pélvico para confirmar el diagnóstico de trabajo de parto prematuro.
Es importante darse cuenta de que si sus contracciones no cambian su cuello uterino, no está en trabajo de parto prematuro, incluso si puede sentir las contracciones. Su médico puede sugerirle reposo y beber más líquidos, ya que incluso una deshidratación leve puede provocar contracciones.
¿Qué tan efectivo es el monitoreo uterino?
Los primeros estudios sugirieron que el monitoreo de la actividad uterina en el hogar (HUAM) podría prevenir el parto prematuro, pero estudios más recientes han demostrado que HUAM no es útil.
Algunos investigadores especulan que la monitorización uterina podría ser útil en circunstancias especiales. Por ejemplo, si una mujer tiene antecedentes de insuficiencia cervical y tiene una prueba de fibronectina fetal positiva, el aumento de las contracciones en un monitor doméstico podría indicar que está en riesgo de dar a luz pronto.
Una revisión Cochrane señaló que es necesario realizar más investigaciones sobre la efectividad de la monitorización domiciliaria para prevenir el parto prematuro. No se han realizado suficientes estudios grandes para saber si su uso ayuda a reducir el parto prematuro.
Para las mujeres que viven lejos del hospital, esto podría ayudarlas a decidir cuándo ir al hospital.
Sin embargo, en general, los estudios han demostrado que los dispositivos de control del hogar no son siempre útiles. Si su médico le recomienda este tratamiento, asegúrese de comprender por qué sería beneficioso en su caso particular.
También es posible que deba obtener una aprobación especial de su compañía de seguros para calificar para este servicio.