¿Qué es la metástasis hepática?
Una metástasis hepática es un tumor canceroso que se ha diseminado al hígado a partir de un cáncer que comenzó en otro lugar del cuerpo. También se llama cáncer de hígado secundario. El cáncer de hígado primario se origina en el hígado y afecta con mayor frecuencia a personas que tienen factores de riesgo como hepatitis o cirrosis.
La mayoría de las veces, el cáncer de hígado es secundario o metastásico.
Las células cancerosas que se encuentran en un tumor hepático metastásico no son células hepáticas. Son las células de la parte del cuerpo donde comenzó el cáncer primario (por ejemplo, células cancerosas de mama, colon o pulmón).
Otros nombres para esta condición incluyen:
- metástasis hepáticas
- metástasis al hígado
- cáncer en estadio IV o avanzado
Función del hígado
Para comprender la metástasis hepática, es importante comprender el papel del hígado en su cuerpo. El hígado es el órgano más grande del cuerpo y es vital para la vida. El hígado se divide en dos lóbulos y se encuentra debajo de la caja torácica y el pulmón derechos.
Las funciones del hígado incluyen:
- limpiando la sangre de toxinas
- producir bilis, que ayuda a digerir la grasa
- Fabricar muchos tipos de proteínas que se utilizan en todo el cuerpo para la regeneración celular y de combustible.
- fabricar enzimas que inician y participan en numerosas funciones metabólicas corporales
- almacenar glucógeno (azúcar), que el cuerpo usa para obtener energía
El hígado es uno de los órganos más importantes del cuerpo. Es imposible vivir sin un hígado que funcione.
Síntomas de metástasis hepática.
Es posible que no haya síntomas en las primeras etapas de la metástasis hepática. En etapas posteriores, el cáncer puede hacer que el hígado se hinche u obstruya el flujo normal de sangre y bilis. Cuando esto sucede, pueden aparecer los siguientes síntomas:
- pérdida de apetito
- pérdida de peso
- orina de color oscuro
- hinchazón o distensión abdominal
- ictericia, coloración amarillenta de la piel o el blanco de los ojos
- dolor en el hombro derecho
- dolor en el abdomen superior derecho
- náusea
- vomitando
- Confusión
- sudores y fiebre
- hígado agrandado
Cuando el hígado está agrandado, se puede sentir un bulto en el lado derecho del abdomen debajo de la caja torácica.
Cuándo buscar atención médica
Es importante que consulte a su médico de inmediato si tiene alguno de los síntomas descritos anteriormente. Los siguientes síntomas indican un problema más urgente y grave:
- vómitos persistentes, es decir, vómitos más de dos veces al día durante más de un día
- sangre en el vómito
- pérdida de peso reciente e inexplicable
- evacuaciones intestinales negras
- dificultad para tragar
- nueva hinchazón en las piernas o el abdomen
- ictericia o coloración amarillenta de la piel
Debe consultar a su médico de inmediato si presenta síntomas de metástasis hepática. Si alguna vez ha tenido algún tipo de cáncer, debe visitar a su médico con regularidad para hacerse chequeos.
Causas de la metástasis hepática.
El riesgo de que el cáncer se disemine o metastatice al hígado depende de la ubicación del cáncer original. Los cánceres primarios que tienen más probabilidades de diseminarse al hígado son los cánceres de:
- pecho
- colon
- recto
- riñón
- esófago
- pulmón
- piel
- ovarios
- útero
- páncreas
- estómago
Incluso si se extirpa el cáncer primario, la metástasis hepática aún puede ocurrir años después. Si ha tenido cáncer, es importante conocer los signos de metástasis hepática y hacerse chequeos regulares.
Proceso de metástasis
Hay seis pasos en el proceso de metástasis. No todos los cánceres siguen este proceso, pero la mayoría sí.
- Invasión local: las células cancerosas se mueven desde el sitio primario hacia el tejido normal cercano.
- Intravasación: las células cancerosas se mueven a través de las paredes de los vasos linfáticos y los vasos sanguíneos cercanos.
- Circulación: las células cancerosas migran a través del sistema linfático y el torrente sanguíneo a otras partes del cuerpo.
- Arresto y extravasación: las células cancerosas dejan de moverse cuando llegan a un lugar distante. Luego se mueven a través de las paredes de los capilares (vasos sanguíneos pequeños) e invaden el tejido cercano.
- Proliferación: las células cancerosas crecen en un lugar distante y crean pequeños tumores llamados micrometástasis.
- Angiogénesis: las micrometástasis estimulan la creación de nuevos vasos sanguíneos, que suministran los nutrientes y el oxígeno necesarios para el crecimiento del tumor.
Diagnóstico de metástasis hepática
El médico puede sospechar de cáncer de hígado si el hígado está agrandado en el examen, si la superficie del hígado no es lisa o si se informa alguno de los síntomas anteriores. Se necesitarán varios tipos de pruebas para confirmar el diagnóstico. Estas pruebas incluyen:
Pruebas de función hepática
Las pruebas de función hepática son análisis de sangre que indican qué tan bien está funcionando el hígado. Los niveles de enzimas hepáticas a menudo se elevan cuando hay un problema. Los marcadores sanguíneos o séricos son sustancias en la sangre que están relacionadas con el cáncer. Cuando hay cáncer de hígado primario, pueden detectarse niveles más altos de alfa-fetoproteína (AFP) en la sangre. Las pruebas de función hepática pueden ayudar a distinguir entre el cáncer de hígado primario y la metástasis hepática. Los marcadores de AFP también se pueden utilizar para controlar los efectos del tratamiento del cáncer de hígado primario.
Tomografía computarizada del abdomen
Una tomografía computarizada (TC) es un tipo especial de radiografía que toma imágenes visuales de órganos de tejidos blandos en detalle. El tejido canceroso tendrá una apariencia apolillada.
Ecografía del hígado
También llamada ecografía, una ecografía transmite ondas sonoras de alta frecuencia a través del cuerpo. Estas ondas sonoras producen ecos. Luego, los ecos se utilizan para crear imágenes computarizadas similares a mapas de las estructuras de los tejidos blandos del cuerpo.
Resonancia magnética
La resonancia magnética (MRI) crea imágenes extremadamente claras de los órganos internos y las estructuras de los tejidos blandos. Utiliza ondas de radio, un imán grande y una computadora.
Angiograma
En un angiograma, se inyecta un tinte en una arteria. Cuando se toman imágenes del cuerpo a lo largo de la vía de esa arteria, se pueden producir imágenes de estructuras internas de alto contraste.
Laparoscopia
La laparoscopia es un tubo estrecho con una luz y una herramienta de biopsia (muestra de tejido). El laparoscopio se inserta a través de una pequeña incisión y se toman biopsias para estudiarlas bajo un microscopio. La laparoscopia es el método mínimamente invasivo más confiable para diagnosticar el cáncer.
Estadificación del cáncer
Si su cáncer se ha diseminado al hígado, lo más probable es que esté en etapa IV. La estadificación asigna un número (del 1 al 4) al cáncer. La estadificación varía desde un tumor localizado hasta metástasis sistémicas (diseminación del cáncer) al torrente sanguíneo, el sistema linfático y otros órganos (2 a 4).
Tratamientos para el cáncer de hígado
Actualmente se utilizan varias opciones para tratar el cáncer que ha hecho metástasis en el hígado. En la mayoría de los casos, el tratamiento será paliativo. Esto significa que se utilizará para controlar los síntomas del cáncer y prolongar la vida, pero probablemente no resultará en una cura. Generalmente, la elección de los tratamientos dependerá de:
- la edad y la salud general de la persona
- el tamaño, la ubicación y la cantidad de tumores metastásicos
- ubicación y tipo de cáncer primario
- los tipos de tratamiento contra el cáncer que el paciente recibió en el pasado
Terapias sistémicas
Las terapias sistémicas contra el cáncer tratan todo el cuerpo a través del torrente sanguíneo. Estas terapias incluyen:
Quimioterapia
La quimioterapia es una forma de tratamiento que usa medicamentos para destruir las células cancerosas. Se dirige a las células que crecen y se multiplican rápidamente, incluidas algunas células sanas.
Terapia de modificadores de la respuesta biológica (BRM)
La terapia BRM es un tratamiento que usa anticuerpos, factores de crecimiento y vacunas para estimular o restaurar el sistema inmunológico. Esto ayuda a la capacidad de su sistema inmunológico para combatir el cáncer. La terapia BRM no tiene los efectos secundarios habituales de otras terapias contra el cáncer y, en la mayoría de los casos, se tolera bien.
Terapia dirigida
La terapia dirigida también mata las células cancerosas, pero es más precisa. A diferencia de los medicamentos de quimioterapia, los tratamientos dirigidos pueden diferenciar entre el cáncer y las células sanas. Estos medicamentos pueden destruir las células cancerosas y dejar intactas las células sanas. Las terapias dirigidas tienen diferentes efectos secundarios que algunos otros tratamientos contra el cáncer. Los efectos secundarios, que pueden ser graves, incluyen fatiga y diarrea.
Terapia hormonal
La terapia hormonal puede retardar o detener el crecimiento de ciertos tipos de tumores que dependen de las hormonas para crecer, como el cáncer de mama y de próstata.
Terapias localizadas
Las terapias localizadas se dirigen solo a las células tumorales y al tejido cercano. Se pueden utilizar cuando los tumores hepáticos son pequeños en tamaño y en número.
Radioterapia
Esta terapia usa radiación de alta energía para destruir las células cancerosas y encoger los tumores. Puede provenir de:
- Máquinas de radiación, como radiación de haz externo.
- materiales radiactivos colocados en el cuerpo cerca de las células cancerosas, lo que se conoce como radiación interna
- Sustancias radiactivas que viajan por el torrente sanguíneo.
Ablación por radiofrecuencia (RFA)
La RFA se usa comúnmente para tratar el cáncer de hígado primario y se puede usar para tratar la metástasis hepática. La RFA es un procedimiento que utiliza corrientes eléctricas de alta frecuencia para generar calor que destruye las células cancerosas.
La extirpación quirúrgica es posible cuando hay una pequeña cantidad de tumores que afectan solo una pequeña área del hígado.
Perspectivas a largo plazo para la metástasis hepática
En casi todos los casos, una vez que un cáncer primario se diseminó o hizo metástasis en el hígado, no hay cura. Sin embargo, los tratamientos actuales pueden ayudar a mejorar la esperanza de vida y aliviar los síntomas.
El éxito relativo del tratamiento depende de la ubicación del cáncer primario y de cuánto se haya diseminado al hígado.
La investigación actual está buscando nuevas formas de combatir y matar las células cancerosas, como hiperestimular la respuesta inmune e interrumpir los pasos individuales en el proceso metastásico.