Cirugía de LCA
La cirugía del ligamento cruzado anterior (LCA) generalmente se realiza para reparar el daño en el ligamento que conecta el fémur (hueso del muslo) con la tibia (espinilla) y ayudar a mantener la articulación de la rodilla en funcionamiento.
La recuperación incluye descanso, fisioterapia y regreso progresivo a las actividades. Cumplir con su plan de rehabilitación es crucial para facilitar su pronta recuperación.
Recuperación de ACL
Por lo general, después de que se complete la cirugía de LCA, lo enviarán a casa el mismo día. Una vez que se despierte de la anestesia, es probable que practique caminar con muletas y le coloquen una rodillera o una férula.
Se le darán instrucciones escritas sobre cómo ducharse y cuidados posoperatorios inmediatos.
Los cirujanos ortopédicos comúnmente sugieren seguir el modelo de primeros auxilios de RICE (reposo, hielo, compresión, elevación) para ayudar a aliviar la hinchazón después de la cirugía. No use una almohadilla térmica durante la primera semana después de la cirugía.
Dependiendo de su situación específica, puede comenzar a poner peso en su pierna dos o tres semanas después de la cirugía. Podría recuperar el uso completo de la rodilla en un plazo de cuatro a ocho semanas.
Es muy probable que su médico le recomiende fisioterapia para ayudarlo a fortalecer las piernas y las rodillas. La fisioterapia puede durar de dos a seis meses.
Un estudio de 2016 mostró que de 80 atletas aficionados, el 47.5 por ciento de ellos regresaron a su deporte un promedio de ocho meses después de la reconstrucción del ligamento cruzado anterior.
Para ayudar a que su herida sane, asegúrese de cambiar el apósito de su herida de acuerdo con las instrucciones de su médico. Eso podría incluir mantener la herida limpia y libre de escombros y usar un vendaje elástico.
Consejos para una pronta recuperación
Recuperarse de una cirugía de LCA puede ser largo y difícil, pero existen formas de hacer que su recuperación sea lo más rápida posible mientras logra el mejor resultado.
Escuche y lea sus instrucciones postoperatorias
Después de la cirugía, se le deben dar instrucciones verbales para la recuperación, así como instrucciones escritas. Asegúrese de leer y comprender esas instrucciones y lo que debe buscar en cuanto a infecciones o reacciones adversas a la cirugía.
Asiste a todas tus citas
Aunque puede ser tentador saltarse algunas de sus citas de rehabilitación o sus citas de control, no lo haga. Asista a todas sus citas o reprograme las que pueda tener que faltar.
Ir a fisioterapia
Se necesita fisioterapia para ayudarlo a recuperar la fuerza en la pierna. Si no tiene un fisioterapeuta habitual, pídale sugerencias a su médico en su área.
Asegúrese de realizar y participar en todos los ejercicios de rehabilitación lo mejor que pueda. Consulte con su compañía de seguros para ver cuántas sesiones cubre su plan.
Toma tu medicina
Si le recetan analgésicos, tómelos según lo prescrito. Pueden ayudarlo a recuperarse más rápido al aliviar el dolor mientras trabaja en ejercicios de fuerza y rango de movimiento en fisioterapia.
No use en exceso sus analgésicos o puede ser más difícil funcionar sin ellos una vez que se haya agotado la receta.
Duerma y alimente adecuadamente
Descansar lo suficiente ayuda a que su cuerpo se recupere. Trate de incorporar proteínas magras, lácteos y muchas verduras en su dieta.
Informe a su médico sobre cualquier problema.
Si tiene fiebre o tiene un dolor anormal u otros síntomas adversos, debe informárselo a su médico. Al abordar los problemas de manera temprana, su médico puede mantenerlo encaminado hacia la recuperación.
No te excedas
Una vez que se sienta un poco mejor, puede ser tentador volver inmediatamente a su antigua rutina. Tómatelo con calma, pide ayuda si la necesitas y aclara cualquier actividad física con tu médico antes de participar.
Quitar
Una lesión del ligamento cruzado anterior (LCA) puede ser difícil de tratar, especialmente si eres un atleta. Sin embargo, si sigue los consejos de recuperación adecuados, debería reanudar sus actividades habituales dentro de un año.
Asegúrese de controlar su recuperación y notifique a su médico si tiene alguna reacción adversa a la cirugía.
Llame a su médico si tiene hinchazón en la pantorrilla, secreción amarilla de las incisiones, temperatura alta o sangrado continuo en el área de la incisión.
Comprométase a seguir las instrucciones de su médico y a asistir a todas sus sesiones de fisioterapia. Su rodilla seguirá fortaleciéndose y podrá dejar la lesión en su pasado y mantenerla allí.