Callos
Los callos son una afección cutánea común. Aunque los callos ocurren con mayor frecuencia en los dedos de los pies y los pies de una persona, pueden desarrollarse en puntos de alta presión en los dedos y las manos.
Los callos son un engrosamiento de la capa externa de la piel en áreas que experimentan frecuentes fricciones. De hecho, los callos (como los callos) son la reacción natural del cuerpo para proteger la piel debajo. El problema con los callos es que pueden resultar incómodos. Algunos incluso pueden causar un dolor moderado.
Los callos son muy similares a los callos. Sin embargo, los callos suelen aparecer en puntos de alta presión, como una protuberancia ósea del pie, mientras que los callos son simplemente piel endurecida por el frotamiento continuo.
Los callos también son más pequeños que los callos. Tienen una forma redondeada con un núcleo central duro de piel áspera.
Causas de callos en los dedos.
Los callos generalmente se desarrollan en los pies de las personas debido a:
- zapatos apretados
- protuberancias óseas en el costado de un dedo del pie
- uñas de los pies excesivamente largas
Pero ¿qué pasa con los dedos?
Al igual que los pies, los callos se desarrollan en los dedos o las manos en respuesta a la presión, la fricción y la abrasión prolongada. Algunos ejemplos de personas que tienen más probabilidades de desarrollar callos en los dedos incluyen personas que trabajan con frecuencia con las manos, como:
- trabajadores de la construcción
- jardineros
- mecánica
- guitarristas
- Atletas
Los síntomas de los callos
Si ha desarrollado callos en los dedos, puede experimentar ciertos síntomas, como:
- piel áspera y amarilla en parches con baches en las yemas de los dedos o en los lados del dedo
- sensibilidad que reacciona a los cambios de presión, como agarrar o pellizcar
- dolor al realizar trabajos manuales sin guantes
- ternura debajo del área afectada
- piel escamosa o cerosa
A veces, las personas con callos en los dedos no experimentan ningún síntoma doloroso. En estos casos, la condición es puramente cosmética.
Con o sin dolor, existen tratamientos caseros y profesionales efectivos que puede utilizar para controlar y eliminar los callos de los dedos.
Tratamiento y prevención
Dependiendo de la gravedad y el tiempo que haya consumido el maíz, existen varios tratamientos a considerar.
Al tratar de controlar los callos, desea suavizar la piel para que pueda tratarse más fácilmente. Algunos métodos que puede utilizar para ablandar los callos incluyen:
- remojarlos en agua tibia
- aplicando cremas hidratantes
- aplicando ácido salicílico
Una vez que la piel se suaviza, puede eliminar las capas de piel muerta con una lima para la piel o piedra pómez.
Es importante evitar quitar demasiada piel para no dañarse las manos o los dedos. En algunos casos, quitar demasiada piel puede causar una infección.
Como cuestión de prevención, puede ayudar a evitar que los callos regresen haciendo lo siguiente:
- Hidrata tus dedos y manos a diario.
- Use guantes durante el trabajo manual.
- Cubra los callos con vendajes o almohadillas.
Si el maíz es extremadamente doloroso o no desaparece con un tratamiento en el hogar, su médico puede extraerlo quirúrgicamente o afeitarlo por usted.
Quitar
El desarrollo de callos en los dedos o las manos no suele causar mucho dolor. Los callos generalmente se resuelven en cuestión de semanas después del tratamiento adecuado.
Recuerde mantener sus dedos humectados, use cubiertas protectoras como guantes o vendas, y use limas para ayudar a eliminar el exceso de piel muerta.
Si siente un dolor excesivo debido a los callos en los dedos o si son particularmente grandes o no desaparecen, consulte a su médico para considerar sus opciones.