Visión general
Picarse la nariz no es en absoluto un fenómeno nuevo. En la década de 1970, se descubrieron pergaminos del antiguo Egipto en los que se hablaba de pagar al recogedor de nariz personal del rey Tutankamón.
Rascarse la nariz y comer mocos, también conocido como mucofagia, tradicionalmente ha sido recibido con miradas de disgusto. Sin embargo, algunos expertos científicos sugieren lo contrario. Esto es lo que debe saber sobre comer mocos.
¿Hay beneficios de comer mocos?
No hay una cantidad significativa de investigación en torno a comer mocos porque la mayoría de la gente no está de acuerdo en participar en los estudios. Sin embargo, Scott Napper, profesor asociado de bioquímica en la Universidad de Saskatchewan, en un intento humorístico de involucrar a sus estudiantes, sugiere que comer mocos en realidad puede tener algunos efectos útiles. Según una entrevista con CTV-News Saskatoon, Napper dice que comer mocos expone el cuerpo al moco que tiene bacterias atrapadas. En teoría, el cuerpo podría desarrollar una inmunidad a las bacterias en este moco y luego estar más equipado para luchar contra las bacterias que causan enfermedades en el futuro.
A veces, hurgarse la nariz (pero no necesariamente comer mocos) puede parecer una forma más conveniente de limpiar la nariz que usar un pañuelo de papel. Si este es el caso, es posible que desee hacerlo en privado y lavarse las manos después para evitar la propagación de posibles enfermedades infecciosas.
¿Cuáles son los riesgos de comer mocos?
No existe un cuerpo de investigación significativo para respaldar o nombrar los riesgos de comer mocos. Sin embargo, hay un estudio que encontró que aquellos que se hurgaban la nariz eran más propensos a portar la bacteria. Staphylococcus aureus que aquellos que no se hurgaban la nariz.
Algunos hurgadores de nariz crónicos también pueden experimentar hemorragias nasales si pican tanto que afectan los tejidos dentro de la nariz.
Picarse la nariz en los niños
Los niños son especialmente propensos a hurgarse la nariz, ya que es posible que no hayan aprendido métodos alternativos, como sonarse la nariz. También tienden a no molestarse por cosas que muchos adultos encuentran socialmente inaceptables o asquerosas.
Tocarse la nariz y comerse los mocos, luego tocar otros objetos domésticos y la piel de otras personas podría aumentar potencialmente los riesgos de propagación de virus y bacterias, como la gripe o un resfriado común. Además, hurgarse la nariz puede causar llagas en la nariz de un niño, lo que a su vez podría provocar que se hurgue más la nariz.
Picarse la nariz en adultos
Si bien muchas personas asocian hurgarse la nariz con la infancia, los adultos también se comen sus mocos. En la edad adulta, varios factores contribuyentes pueden conducir a este comportamiento.
Primero, un hábito puede volverse tan normal para una persona que tal vez ni siquiera se dé cuenta de que se está hurgando la nariz y comiendo sus mocos. En segundo lugar, hurgarse la nariz puede ser una forma de aliviar la ansiedad. En algunas personas, hurgarse la nariz compulsivamente (rinotillexomanía) puede ser una forma de trastorno obsesivo compulsivo.
Cómo dejar de comer mocos
Cuando comer mocos es un hábito, puede ser difícil dejarlo, pero no es imposible. Pruebe estos consejos para vencer el hábito:
- Identifica las causas subyacentes. Si siempre parece tener picazón o secreción nasal, las alergias estacionales podrían ser las culpables. Tomar medicamentos de venta libre, como loratadina (Claritin) o cetirizina (Zyrtec) puede ayudar a reducir la incidencia de secreción nasal y congestión, lo que reduce la cantidad de mocos.
- Intente usar gotas nasales salinas o humidificadores de aire frío. Estos evitan que sus conductos nasales se sequen (y que los mocos se endurezcan), lo que también puede reducir la necesidad.
- Utilice un dispositivo de memoria para ayudar a reducir el hurgarse la nariz subconsciente. Un ejemplo puede ser usar un vendaje alrededor de un dedo que usualmente usa para hurgarse la nariz. Puede interrumpir sus pensamientos cuando vaya a hurgarse la nariz.
- Haga que los pañuelos estén más disponibles guardándolos en su bolsillo, bolso y cajón del escritorio. Es más probable que los use para sonarse la nariz en lugar de pellizcarse.
- Trate de encontrar un calmante alternativo para el estrés. Los ejemplos podrían incluir respirar profundamente, escuchar o cantar una canción favorita u otra actividad que le parezca relajante. Esto puede reemplazar el hábito de hurgarse la nariz por un hábito más saludable y para aliviar el estrés.
Si descubre que se pica la nariz hasta el punto en que tiene hemorragias nasales frecuentes o incluso infecciones, es posible que deba consultar a un médico. A veces, una persona puede beneficiarse de la terapia para volver a entrenar sus comportamientos o incluso de medicamentos para reducir los pensamientos y comportamientos compulsivos.
¿Cuál es la perspectiva para comer mocos?
El moco, o mocos, es una parte protectora natural de su cuerpo. Al atrapar el polvo, las bacterias, los virus y la suciedad antes de que ingresen al tracto respiratorio, la mucosidad en la nariz puede ser protectora.
Sin embargo, no hay mucha investigación que respalde que comer esa mucosidad sea beneficioso para el cuerpo, y podría conducir a un aumento de infecciones al introducir más gérmenes o transmitirlos a otras personas accidentalmente.
Lo que la gente sí sabe es que comer mocos no suele considerarse un comportamiento socialmente aceptable. Si elige sus mocos y no puede dejar de fumar, hablar con un médico puede ayudarlo a dejar el hábito para siempre.