Las glándulas de Skene fueron descritas por primera vez por el Dr. Alexander Johnston Chalmers Skene a finales del siglo XIX. Aunque tal vez no se conozcan ampliamente, las glándulas de Skene desempeñan un papel importante en la salud física y sexual.
Ocasionalmente, las glándulas de Skene pueden inflamarse o infectarse. Esto puede provocar más complicaciones si no se trata. Los cánceres de las glándulas también son posibles, aunque raros.
Siga leyendo para obtener más información sobre las glándulas de Skene y qué hacer si sospecha algún problema de salud.
¿Qué son las glándulas de Skene?
Las glándulas de Skene constan de dos pequeños conductos ubicados a ambos lados de la uretra, en la parte frontal de la pared vaginal.
También conocida como la "próstata femenina", estas glándulas no son en realidad las mismas glándulas prostáticas en la anatomía masculina. Sin embargo, el apodo prevalece debido a las similitudes con la glándula prostática masculina, incluida la capacidad de drenar líquidos hacia la uretra.
También se sospecha que las glándulas de Skene influyen o constituyen una parte del punto G femenino. También están compuestos por los mismos tejidos que el clítoris.
Otros nombres de las glándulas de Skene incluyen:
- Conductos de Skene
- glándulas vestibulares
- glándulas parauretrales
- glándulas periuretrales
¿Cuáles son los propósitos principales de las glándulas de Skene?
Las glándulas de Skene juegan un papel importante en la salud tanto urinaria como sexual.
Primero, las glándulas liberan fluidos en la uretra, lo que ayuda a lubricarla. La uretra en sí es un tubo que es una parte importante del sistema urinario, ya que es responsable de sacar la orina de la vejiga.
También se cree que las glándulas de Skene contienen sustancias antimicrobianas. Cuando se liberan, pueden ayudar a prevenir las infecciones del tracto urinario (ITU).
Al igual que la glándula prostática masculina, las glándulas de Skene también desempeñan un papel en la salud sexual. Cuando se excita, las glándulas de Skene y el clítoris se inflaman debido al aumento del flujo sanguíneo al área.
A medida que se estimulan las glándulas de Skene, secretan fluidos que contienen moco, que ayudan a lubricar durante el coito vaginal. Los investigadores también creen que las excreciones de líquidos de estas glándulas pueden explicar la eyaculación femenina.
¿Cuáles son los problemas de salud comunes asociados con las glándulas de Skene?
Las glándulas de Skene pueden infectarse, lo que también puede afectar la uretra. Por otro lado, una infección de la uretra también podría infectar las glándulas de Skene. Se pueden desarrollar quistes en la glándula, pero el cáncer es poco común.
A continuación se muestra un desglose de algunos de los problemas más comunes con las glándulas de Skene y los síntomas que debe tener en cuenta:
UTI
Se estima que la uretra femenina mide solo 1,5 pulgadas de largo, en comparación con las 8 pulgadas de los hombres. Esta diferencia es una de las razones por las que las mujeres son más propensas a las infecciones urinarias.
Los signos comunes de una UTI incluyen aumento de la micción; orina turbia y maloliente; y dolor al orinar. Esta es una infección bacteriana que requiere antibióticos para su tratamiento.
Esquenitis
La eskenitis es una infección de las glándulas de Skene, que también puede hacer que los tejidos circundantes se inflamen. La gonorrea es la causa más común de este tipo de infección, pero también puede ser causada por una UTI.
Debido a su proximidad a la uretra, los problemas médicos asociados pueden originarse en las glándulas de Skene. También es posible que las glándulas de Skene se infecten cuando hay problemas con la uretra, como una infección urinaria.
La eskenitis puede causar algunos de los mismos síntomas que una UTI, pero también puede notar dolor pélvico, así como dolor durante las relaciones sexuales. Esta infección se trata con antibióticos, pero es posible que se requiera cirugía si la infección progresa.
Cáncer
Si bien el cáncer de las glándulas de Skene es posible, esto es extremadamente raro.
Se sospecha que pueden desarrollarse quistes malignos en estos conductos como resultado de una skenitis no tratada. Los quistes pueden bloquear la apertura de la uretra, provocando una incapacidad para orinar (retención urinaria).
¿Cómo se diagnostican y tratan los problemas de salud de las glándulas de Skene?
Una UTI sospechada o una infección de las glándulas de Skene o el área circundante se trata de inmediato con antibióticos. Su médico diagnosticará una UTI con una muestra de orina. Es posible que se requieran pruebas de imagen para detectar la skenitis.
Las pruebas de imagen, como una resonancia magnética, pueden ayudar a diagnosticar quistes cancerosos de las glándulas de Skene. Su médico puede sospechar de cáncer si ve un desplazamiento de la abertura de la uretra de un quiste. Este tipo de quiste también contiene un líquido similar a la leche.
El cáncer de las glándulas de Skene se puede tratar con radioterapia cuando se detecta a tiempo. Cuanto más avanza el cáncer, mayor es la probabilidad de cirugía.
También se puede requerir la extirpación quirúrgica de tumores si el cáncer se disemina a áreas circundantes, como la uretra o la vejiga.
También es posible desarrollar quistes a lo largo de las glándulas de Skene que no son cancerosos (benignos). En tales casos, su médico puede recomendar drenar los quistes para que no causen más problemas con su sistema urinario.
Tanto los quistes benignos como los cancerosos de las glándulas de Skene se consideran raros.
Cuando ver a un doctor
Debe consultar a su médico de inmediato si experimenta alguno de los siguientes síntomas:
- retención urinaria
- aumento de la micción
- sangre en la orina
- orina turbia y maloliente
- flujo vaginal anormal
- incapacidad para retener la orina (incontinencia urinaria)
- ardor o dolor al orinar
- dolor durante el sexo
- presión anormal a lo largo del hueso púbico
Quitar
Si bien es necesario realizar más investigaciones sobre los beneficios exactos de las glándulas de Skene, se ha establecido que estos pequeños conductos a cada lado de la uretra desempeñan un papel en la salud física y sexual.
A pesar de su pequeño tamaño, las glándulas de Skene a veces son propensas a sufrir complicaciones de salud. Estos incluyen infecciones y, con menos frecuencia, quistes que pueden ser benignos o malignos.
Debido a la complejidad del sistema urinario, es importante consultar a un médico si experimenta algún dolor pélvico o cambios en la micción. El tratamiento oportuno puede ayudar a prevenir más complicaciones, como daño renal por infecciones urinarias.